El cuy es un roedor; un animal pequeño, entre conejo y ratón grande. De ahí el nombre que le dieron los españoles al llegar a América de «conejillo de Indias». Este plato forma parte de la gastronomía andina indígena tradicional, desde Bolivia hasta el sur de Colombia. Se considera un plato exótico porque en algunas casas el cuy se cría como una mascota.
En su región de origen en Colombia, correspondiente al actual departamento de Nariño, es un plato muy apreciado, sobre todo en ocasión de celebraciones importantes. A diferencia de otros platos de la gastronomía colombiana, que tienen variantes en las diferentes regiones del país, el cuy está casi exclusivamente ligado a la región nariñense. Sin embargo, comienza a ofrecerse en la carta de muchos restaurantes de las grandes ciudades como uno de los platos más costosos.
La producción actual de cuy
Debido a la demanda creciente del cuy en la alta cocina, las poblaciones andinas nativas han comenzado a criar el cuy en granjas, engordándolos con grama y granos hasta que alcanzan el peso adecuado, algo más de un kilo. La cría es relativamente sencilla, pues además su ciclo reproductivo es corto. Luego lo procesan de la forma tradicional, como explicaremos más abajo, y lo venden a los restaurantes ya listos para asarlos.
Lo más vistoso, su presentación en la mesa
A pesar de los cuidados iniciales que deben seguirse para preparar el cuy, el ritual más vistoso es su presentación en la mesa. Primero, una entrada hecha a base de las vísceras acompañadas con maíz pira. Luego, se sirve la carne, blanca y jugosa, acompañada de papas asadas y ají de maní. Sin embargo, lo más preciado de todo es el cuero, que debe quedar crocante. Para conseguir ese punto ideal, el cuy debe ser preparado el mismo día.
Ingredientes para el cuy asado
– Un cuy por persona
– Ajo
– Sal
– Cominos
– Papas
– Palomitas de maíz
Para el ají de maní
– 2 ajíes rojos
– 1 cebolla larga
– Agua
– Sal
– 2 huevos cocidos
– Cilantro
– Maní tostado
Cómo preparar el Cuy Asado
A pesar de la simplicidad que puede representar el asado como forma de cocinarlo, su preparación previa y todo el ritual que se sigue para servirlo lo convierten en un plato que requiere conocimiento para prepararlo. Generalmente, este conocimiento es transmitido de padres a hijos siguiendo una tradición.
En la cocina rural, el proceso incluye eliminarle el pelaje valiéndose de agua hirviendo y abrirlo con cuidado para retirar las vísceras sin que se rompan. Se guardan las vísceras para la preparación de la entrada. Otro secreto es saber adobarlo con las cantidades necesarias de cominos, ajo y sal; se recomienda adobarlo, al menos, la noche anterior. Finalmente, se asa en fogata o en horno hasta que esté dorada la piel, generalmente más de hora y media.
Preparación del ají de maní
Los más tradicionales lo muelen en la piedra, aunque por comodidad también puede molerse en el procesador de alimentos. Se deben lavar los ajíes y eliminarles las semillas; se colocan en el procesador junto con la cantidad de agua necesaria para que se muela y que no quede muy líquido ni muy espeso. Se le agrega sal al gusto y se procesa. Ahora se agrega el maní y se vuelve a procesar. Fuera de la procesadora, se le adiciona huevo duro picado en pequeños trocitos, cebolla también picadita y cilantro al gusto.
Tal vez no es de los platos más atractivos a la vista, ¡pero es delicioso!